LEYMA NATURA BASQUET CORUÑA – FC BARCELOBA REGAL “B”
(93-56).
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| Dura lucha por un balón entre jugadores de ambos bandos. Foto:laopinioncoruna.es |
El Leyma Natura Básquet Coruña sumó su quinto
triunfo consecutivo de manera sobresaliente ante el Barcelona B. El equipo
impuso su ritmo y convirtió en una caricatura de sí mismo a su rival.
Ya avisó Antonio Herrera en la previa de que el
Barcelona Regal intentaría imponer un tempo frenético de juego para tratar de
aprovechar el ímpetu de sus jugadores, jóvenes y con proyección. Pero el
conjunto naranja traía la lección bien aprendida de casa.
El ritmo lo querían y sabían imponerlo los
naranjas, ralentizando su ataque cuando era necesario y no dejándose contagiar
por las rápidas transiciones de los culés. Intercalando diferentes tipos de
defensa, en zona o individual, cerrando el rebote tanto ofensivo como defensivo
a los hombres dirigidos por Comenge los coruñeses iban secando el potencial
ofensivo de su rival.
A un contrario que solía moverse en guarismos
cercanos la centena había que atarlo en corto y eso era justamente lo que
hacían los herculinos. Pese a su poderío latente en la cancha, el Leyma sabía
que un mínimo atisbo de relajación podía ser fatal para un rival que ya había
demostrado en la pasada jornada que era capaz de remontar.
La reacción de Regal no se hizo esperar, pero si
algo tiene el equipo coruñés son recursos tanto
individuales como colectivos.
Si el héroe local de las últimas jornadas había sido un inconmensurable Asier
Zengo, en esta ocasión fue el turno de Marcos Suka-Umu, que se echó al grupo a
la espalda en el momento de arreón azulgrana.
Pero no solo de figuras vive el Leyma, que
funciona como un perfecto engranaje en bloque. La férrea defensa herculina funcionó
como una ratonera en la que se estrellaban los ataques culés. Tampoco importaba
la mayor envergadura de los interiores Barcelona, y menos cuando el Leyma era
capaz de cargar el rebote e incluso tirarse a por él como si cada balón fuese
el último.
Esa intensidad defensiva del Leyma Natura,
lógica cuando las diferencias en el marcador no eran importantes, se mantuvo
incluso cuando los locales ya ganaban por más de 30 puntos (73-40). Todo un
varapalo para los azulgrana, acostumbrados a apabullar a sus rivales. No
pudieron esta vez por su mal porcentaje en el tiro y condicionados por el gran
trabajo de los coruñeses, que en ningún momento bajaron la intensidad defensiva
ni el mordiente en ataque. La permanencia parece ya un objetivo menor. Este
Leyma Natura vuela alto.
Crónica:laopinioncoruna.es
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