sábado, 27 de octubre de 2012

LEB ORO | JORNADA 4, CORUÑA Y ANDORRA, DOS RECIEN ASCENDIDOS, SIGUEN LÍDERES INVICTOS (I).


CÁCERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD – PLANASA NAVARRA (69-75)

Starosta fue el MVP del encuentro (25val)
Foto de archivo:diariodenavarra.es
Comenzaba el partido bastante igualado con un PLANASA NAVARRA muy centrado en defensa sabedor del poderío ofensivo de Cáceres.
Los hombres de Jareño realizaban una buena selección de tiro y lograban ventajas de 6 puntos, pero los triples de Robles y Van Oostrum para los cacereños igualaban el electrónico para finalizar el primer cuarto con empate a 21.
En el segundo periodo los navarros cogían de nuevo la ventaja un triple de Douglass incluído. Pero la defensa cacereña , al más puro estilo de La Palma del año pasado entrenado también por Frade, limitaba el ataque foral. Un triple del británico Van Ostrum y una canasta de Morentín ponían el 38-30. Planasa Navarra caía entonces en errores en ataque. Pero un triple de Bonhome acortaba las diferencias (38-33). Se llegaba al descanso con 42-35. Tras la pausa 4 puntos consecutivos de Cáceres encendían las alarmas navarras (46-35).
PLANASA NAVARRA reaccionaba con un lanzamiento desde los 6.75. El posterior 49-40 hacía a Jareño pedir un tiempo muerto mediado el tercer cuarto. A continuación Iñaki Narros lograba un triple y en la misma acción pitaban una técnica al entrenador cacereño Carlos Frade (49-44).
Después el estadounidense Douglass conseguía un triple que conectaba de nuevo a los pamploneses al electrónico (51-47). Pero la alegría visitante duraba poco ante el acierto triplista de Van Ostrum (54-47). En un encuentro frenético era el tiempo de los tiradores tal y como demostraría Joaquín Bonhome con un triple 56-54. A
ello se sumó Douglas demostrando su calidad en todo el cuarto ayudando a PLANASA NAVARRA al terminar el cuarto con empate a 58 gracias también a la canasta final del madrileño Álvaro Frutos.
El último cuarto Starosta comenzaba aventajando a los navarros. Pero Cáceres reaccionaba con rapidez (64-60) buscando las jugadas rápidas y los triples como principales recursos ofensivos.
PLANASA NAVARRA cargaba el juego interior en su torre checa ayudado en el perímetro exterior por Narros que ponía el 64-68 con dos grandes triples consecutivos a 5 minutos para el final.
Pero Cáceres pagaba a los navarros con la misma moneda (67-68) y después se adelantaba con Ashaolu. Un mate de Cabanas adelantaría de nuevo a los pamploneses (69-70) que entraban con posesión y ventaja en el minuto final. Pero Starosta fallaba dos tiros libres.
Menos mal que Cáceres erraba el siguiente ataque y además mandaba al checo de nuevo a los tiros libres logrando los 2 (69-72) a 40 segundos. Cáceres atacaba a 17 segundos del final y Morentín erraba el triple que podía lograr el empate y cometían falta sobre Álvaro Frutos que metía solo el segundo de sus tiros libres (69-73).
Aún tuvo tiempo PLANASA NAVARRA para robar el balón y encestar Soares ganando por 69-75.
CACERES 69
Ashaolu 13, Robles 7, Van Oostrum 18, Peña 0, Morentín 4 -quinteto inicial – Duinker 7, López 4, Nguema 2, Lorenzo 14, Hobbs 0.
PLANASA NAVARRA 75
Sanz (8) , Frutos (3) ,Soares (2), Narros (19), Cabanas (6) quinteto inicial-. También jugaron Starosta (18),Douglass (10),Bonhome (8), Kasse (1),Volkus (0).
Crónica:basketnavarraclub.com

KNET – LEYMA NATURA BASQUET CORUÑA (80-83).

Kale anotó 15 puntos.
Foto:lavozdegalicia.es
Es mucho más que un sueño. Ya no es una casualidad. El Básquet Coruña sumó ayer la cuarta victoria en cuatro partidos y lo hizo demostrando que es un equipo con el que hay que contar en esta LEB Oro. Ayer superó al Clavijo (80-83) con una demostración de calma y tesón impropia de un recién ascendido.

Marcos Suka Umu fue el gran protagonista del último minuto del duelo. Pasó de héroe a villano, y de villano a héroe en poco más de noventa segundos. Primero anotó cinco puntos seguidos al más puro estilo Kobe Bryant: apoderándose del balón y asumiendo toda la responsabilidad. Ahí el Básquet Coruña ganaba por tres (78-81), pero con 80-81 el madrileño perdió el balón que podía sentenciar el encuentro a falta de 15 segundos.

El destino es tan caprichoso que hacía que el héroe fuera el villano. Pero había más. En el ataque final de los locales, Uriz se atragantó de balón y cuando penetró se llevó el tapón del omnipresente Suka Umu. ¿Podía ser otro? Los riojanos acabaron haciendo falta y Almazán sentenció desde el tiro libre.

Problemas en el rebote

El partido comenzó con problemas en el rebote. Y no por culpa únicamente de los interiores. Quizás se echó en falta que los aleros cerraran más. Tan pronto como los coruñeses ajustaron este defecto inicial comenzaron a mandar en el electrónico. La máxima renta fue de ocho.

Los locales elevaron su agresividad en el desenlace del duelo y los problemas en el rebote visitaron reaparecieron hasta el 74-71. Menos mal que Suka Umu tenía el día.

Parciales: 20-18, 22-25 (42-43, al descanso); 18-21 y 20-19
Árbitros: Carballo y Servano. Sin exclusiones por faltas.
Incidencias: Palacio de los deportes de Logroño

KNET: Mesa (8), Ruiz de Galarreta (11), Suárez (3), Uriz (14) y Santana (6) -cinco inicial-. También: Mejeris (11), Arévalo (11), Joan Tomás (8), Herrero (2) y Rakocevic (6)

CORUÑA: Johnson (7), Kale (15), Xavi López, Almazán (6) y Suka Umu (11) -cinco inicial-. También jugaron: Lázaro (9), Román (6), Hernández (4), Zengotitabengoa (14), Alonso (2) y Rogers (9)
Crónica:lavozdegalicia.es

BC RIVER ANDORRA – CLUB MELILLA BALONCESTO (89-77).
Hampl lucha un balón con Wachsmann
Foto:elperiodicdandorra.ad
Invicto, con un cuatro de cuatro y jugando contra rivales como Breogán, Lucentum y ayer el Melilla, el River continuar líder en la LEB Oro consagrándose como un matagigantes total en otra gran fiesta en el Polideportivo.
Los 1.200 aficionados acabaron rendidos al equipo de Peñarroya, aunque el inicio no había sido nada prometedor, fruto de los nervios y la inseguridad.Esto es lo que transmitió el cinco de Peñarroya en los primeros minutos, errático en el tiro aunque el rival también arrancó con síntomas similares.
Lo cierto es que el River le veía más metido, buscaba alternativas más fáciles de tiro y no permitía al rival tirar con comodidad pero este deporte consiste en que el balón entre por la canasta y aquí venía el desesperante naufragio colectivo que mantener el equilibrio en el marcador en los primeros minutos. En el otro bando Castro orquestaba o tiraba de su equipo como podía pero las dos derrotas que llevan debían pesar demasiado porque le faltaba electricidad a su juego.
La igualdad en los primeros diez minutos, que terminó 21-20, se fue difuminando por momentos en el segundo cuarto, con un Hampl más intuitivo que nadie bajo mostradores y recogiendo lo que sus compañeros fallaban. Mientras el Melilla, irreconocible, seguía como un flan y fallaba incluso en la mejor variable atacante -1 de 7 en triples al descanso con un 14,3% de acierto, muy lejos del 57,8 que tenía de promedio-el River buscó más el juego perímetro. Además, en el rebote funcionaba más que nunca y sólo faltaba encontrar una muñeca caliente para que la defensa visitante no estaba funcionando. Blanch se inspiraron los últimos segundos con dos triples seguidos y he aquí que abrió un agujero ya tranquilizador para irse al descanso 43-36.
La fantástica labor en la reanudación permitió aumentar más lesdiferències. El Melilla no encontraba la manera de ver canasta y tardó tres minutos y medio en mover su casillero de puntos. Entonces Safford ya había anotado seis puntos-mate rozando el techo incluida-y Blanco un triple que significó un parcial de 11-2 (54-40, minuto 24).
García de Vitoria pidió un tiempo muerto a la desesperada porque el partido se les escapaba. Francis y Manzano comenzaron a arreglar las pésimas estadísticas de tres que tenían los visitantes hasta entonces, Riera se añadió a Castro para buscar el acierto en la corta distancia y para que vean el talento que tiene el Melilla, en cinco minutos secar la diferencia que el River tanto le había costado hasta el 59-58.
DEVASTADOR EN EL MOMENTO CLAVE  
Todo para hacer el último cuarto, con un nuevo igualado 63-60, pero como en el tercer cuarto el River salió con una marcha más y con un parcial de 9-0, esta vez con tiempo muerto por medio, se puso de nuevo al límite de los diez puntos de renta. Dos minutos y medio tardó el Melilla al ver canasta. Estaba hundido moralmente porque cada vez que se acercaba, el River reaccionaba y le devolvía la moneda. Ya con más de media hora de partido en las piernas los visitantes ya se le acababan las fuerzas para soñar con la remontada y dos triples más, de Dani Pérez y Maresch, remataron la faena cuando quedaban cinco minutos exacto (78-62).
Peñarroya no paraba de pedir tensión para evitar sorpresas porque el Melilla buscaba las posesiones cortas pero el River se encontraba tan fuerte en la cuenta atrás que ni sufrió para mantenerse invicto.
Crónica:elperiodicdandorra.ad

FORD BURGOS – LUCENTUM ALICANTE (64-69)
Green con el balón ante Lucas Sikma.
Foto:Dpt Comunicación CB Atapuerca
Rubén Perelló regresó a Burgos para doblegar a su mentor, Andreu Casadevall, y -de paso- reivindicarse como primer técnico tras la espantada de Josep María Berrocal, emigrado a Ucrania después de dos derrotas consecutivas. El preparador valenciano, con o sin receta mágica, fue capaz de mejorar el rendimiento defensivo del Lucentum, principal problema del equipo alicantino en el inicio de la Liga.

Y ahí empezó a cimentarse el triunfo frente a un rival directo en la pugna por el ascenso dentro de una de las pistas más difíciles de la 'liga menguante': el Plantío. El bloque de Perelló, que en las tres citas anteriores había recibido más de 40 puntos al descanso, anoche se fue al receso del entreacto con sólo 26 tantos en contra. El control del rebote y la reducción de espacios en la 'pintura' resultaron determinantes para completar el logro.

La proyección anotadora del conjunto fue óptima en la primera mitad, con todos los jugadores que comparecieron en pista sumando puntos. A diferencia de las tres jornadas iniciales, la rotación completa aportó cosas positivas, tangibles e intangibles, a pesar de Green.

Perelló dio continuidad a los conceptos ideológicos de Berrocal desde el salto inicial pero manejó los tiempos mucho mejor, sin sesgar rachas positivas -Sabat o Bas- y sin demorar presencias más allá de los 26 minutos.

Andreu Casadevall no encontraba huecos en la zona lucentina, así que no pudo beneficiarse de las canastas fáciles que sí obtuvieron Clavijo, Barça B y Andorra. Eso obligó a los burgaleses a moverse más de la cuenta por el perímetro y a asumir más riesgos. La charla del técnico del Autocid dio resultado en el fugaz paso por el vestuario dado que tras la reanudación un parcial de 14-6 limó la renta alicantina.

El Lucentum llegó al cuarto definitivo con una ventaja significativa (+12) y, lo que es más relevante, con 44 puntos encajados. El intercambio de golpes, ahora con la defensa levantina menos eficaz, benefició a los locales, que fueron capaces de apoyarse en el impulso de la grada y cierto desvarío arbitral para situarse a tres puntos de su rival a falta de 53 segundos.

Las urgencias de otrora se esfumaron y, por apoyo o no a Perelló, la plantilla templó los nervios, apretó a su adversario, reboteó y dejó que Guillermo Rejón apuntalara desde 4,70 un triunfo que avala la continuidad del técnico ayudante a pesar de la 'alargadísima' sombra de Gustavo Aranzana, que sigue esperando la llamada definitiva.

Ford Burgos: Dani López (6), Jeff Xavier (7), Vinicius Toledo (9), Jorge García (14), Lucas Sikma (1) -quinteto titular- Pep Ortega (12), Juan Aguilar (3), Franco Rocchia (-), Alberto Miguel (2) Isaac López (-) y Sergio Olmos (-).

Lucentum Alicante: Pedro Rivero (5), Rafa Huertas (9), Shaun Green (3), Coppenrath (7), Rejón (5) -quinteto titular- Sabat (15), Roma Bas (12), Jesús Fernández (2), Alex Llorca (9) y Darryl Middleton (2).

Crónica:laverdad.es



LOBE HUESCA – BREOGAN DE LUGO (43-71)

Ogirri intenta zafarse de un jugador del LOBE.
Foto:diarioaltoaragon
Breogán logró este viernes en Huesca su primera victoria a domicilio. Fue un triunfo incontestable, por casi treinta puntos (43-71), ante un Lobe Huesca que solo dio guerra en el primer y el tercer cuartos.
Los lucenses hicieron un partido muy serio en defensa en la cancha de un Lobe (el Peñas Huesca de siempre) que marcha de vicecolista. Muestra de ello es que los hombres de Pepe Rodríguez se hicieron con 32 rebotes, 25 de ellos defensivos, por los 24 oscenses.

Los aragoneses fiaron su ataque a la efectividad del esloveno Sandi Cebular, que acabó sumando dieciséis puntos. Tal flojedad en el ataque se evidenció en los marcadores del segundo y el cuarto período, que el Huesca cerró con ocho y tres puntos, respectivamente.

Mientras los locales apostaban por una única referencia ofensiva, el ataque breoganista estuvo más repartido. Así, Leonavicius fue el máximo anotador visitante, con once puntos (y eso que falló sus cuatro lanzamientos de tres puntos), mientras que los más valorados fueron Schaftnaar y Manu Gómez.

Crónica:elprogreso.com






                                                                                                             

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