FORD BURGOS – LEYMA NATURA BASQUET CORUÑA (92-52).
Aguilar ante la presión de un jugador coruñés. Foto:Dpt Comunicación CB Atapuerca |
Partido para recomponerse de una amarga derrota contra Ourense
en la pasada jornada.
Los pupilos de Andreu Casadevall salieron con el papel bien
aprendido y plasmaron una gran interpretación sobre la pista. Leyma Coruña fue
rival de un cuarto y quizá, si siquiera eso. Autocid consiguió pronto una
pequeña renta y la fue ampliando paulatinamente hasta terminar de romper el
partido definitivamente en el tercer cuarto.
El último cuarto sirvió para ver que Autocid ha aprendido de
los errores de perder ventajas cuando el marcador es contundente. No sólo no la
mantuvieron, sino que la ampliaron en más de diez puntos para cerrar un partido
redondo que hace olvidar por completo la pasada jornada.
El partido.
Planteó un buen esquema Andreu Casadevall con su quinteto de
gala: Dani López, Jeff Xavier, Marcus Vinicius, Jorge García y Luke Sikma.
La defensa zonal dio pronto los primeros resultados, gracias a constantes
recuperaciones de balón. El pero lo puso la precipitación de los jugadores en
algunos momentos (11-5). Llegados al ecuador del primer cuarto, el marcador se
estancó. Muchas imprecisiones que dejaron a El Plantío huérfano de puntos
(15-14). Pasado el momento denso del partido, Autocid supo gestionar mejor los
dos últimos minutos e irse con una ligera ventaja (24-17).
El segundo cuarto resultó especialmente generoso
en esfuerzo. Autocid comenzó mejor, pero Coruña se aferraba a no caer por
encima de los diez puntos de diferencia (29-21).
En la segunda mitad del periodo las fuerzas se mantuvieron
equilibradas. Como pasase en el primer cuarto, los dos últimos minutos Autocid
encontró el camino y gracias a un parcial de 6-0 se comenzó a ver realmente a
un Coruña roto (42-29). La bocina que marcaba el descanso sonó con
un 45-30 en el luminoso.
Gran salida de vestuarios. Parcial de 8-2 para que Antonio
Herrera parase el partido con sólo dos minutos jugados (53-34). La continuación
fue más de lo mismo, dominio contundente de los azulones y cabezas gachas de
los gallegos que no creían en sus posibilidades de remontar (69-40). Antonio
Herrera se sentó en el banquillo a ver como pasaba el temporal. El tercer
cuartoterminó con +30 para Autocid (75-45).
Un último cuarto testimonial se tendría que vivir
para ver a un Autocid que aprendió la lección de no perder la tensión del
partido por llevar una ampliar renta. Los burgaleses mantuvieron su tempo del
partido y siguieron minando la confianza de un equipo visitante que la había
perdido hace muchos minutos. El partido se cerró con un abultado 92-52.
Parciales: 24-17 / 21-13 / 30-15 / 17-7.
Autocid Ford Burgos: Pep Ortega (4), Rubén Duarte (0),
Dani López (11), Juan A. Aguilar (4), Jorge García (10), Marcus Vinicius (10),
Alberto Miguel (8), Franco Rocchia (3), Luke Sikma (9), Jeff Xavier (13), Isaac
López (10), Sergio Olmos (10).
Leyma Natura Coruña: Jonathan Kale (9), Raúl Lázaro (),
Víctor Hernández (1), Javier Román (2), Assier Zengotitabengoa (14), Xavier
López (3), Pablo Almazán (3), Javier Lucas (1), Eduardo Hernández-Sonseca (11),
Marcos Suka-Umu (4), Gergely Somogyi (0).
Crónica:Ismael del Álamo
Dpt Comunicación CB Atapuerca
BC RIVER ANDORRA – PLANASA NAVARRA (78-53).
Canasta de Pablo Sánchez. Foto:elperiodicdandorra.ad |
Si un jugador de un equipo hace
32 de valoración-monumental Dmitry Flis, 22 puntos, 10 rebotes-, y el conjunto
de los jugadores rivales suman 38, queda claro cuál será el
resultado. Ayer el River tuvo seguramente el partido más plácido de la
temporada (78-53), ante un Planasa Navarra que duró un cuarto, y casi ni
eso. Los andorranos siguen líderes indiscutibles, mientras que el Burgos,
en su casa contra el Coruña, ayer también pasó la escoba (92-52).
El inicio del encuentro fue
tranquilo en una especie de traslado del talante del público andorrano, como es
habitual frío al principio de cualquier enfrentamiento. El River empezó
con un 4-0 gracias a Hampl y Pérez, aprovechando el equipo la envergadura bajo
canasta, ya que Peñarroya puso de salida el checo y Moncasi.Pero a pesar de las
dos torres, el Planasa, con Cage en la pista-la temporada pasada fue el River-,
recuperaba con dos triples consecutivos de Douglas que dejaba el empate a seis,
después de que Hampl también anotara.
No parecía una batalla táctica,
porque los dos equipos atacaban con cierta tranquilidad, sin que las defensas
mostraran gran agresividad.Pero sólo hacen falta puntos para calentar el
ambiente, y en esto aparecieron un Flis de tres y la respuesta idéntica en
cesta contraria de Douglas, que dejaba el marcador 9-12. Así que la grada
empezó a gritar como el River en la pista para despertar, y así Flis de dos, un
triple de Pablo Sánchez y la aportación de Blanch, neutralizaban las acciones
bajo canasta de Starostin, para poner 16-16. El primer cuarto acababa con
18-18, con una buena acción ofensiva de Pablo Sánchez: rebote y dos puntos.
La reanudación fue
demoledora. El River funcionaba en quinta marcha y el Planasa Navarra
parecía atrapado. La defensa local no dejaba margen, y en ataque casi los
andorranos no perdonaban, aunque buscar con demasiada insistencia un triple que
costaba ver hasta que Flis rompió el ritmo con el 29-20.
A partir de ahí, el Planasa
pareció desvanecerse y el River jugaba a placer hasta que con un triple de
Schreiner que dejaba el 36-23, obligó al técnico visitante a pedir un tiempo
muerto. De nada sirvió, sin embargo, porque los andorranos seguían en
quinta marcha haciendo su hasta una máxima ventaja de 16 con el 41-25, en lo
que era otro triple de Flis. Con 41-28 se marchaban los dos equipos a los
vestuarios.
La sensación de dominio local se
mantuvo en el tercer cuarto, a pesar de algunas dudas iniciales porque el
Planasa, dolido en el orgullo, intentaba hacer en jugadas rápidas lo que no
había conseguido durante 20 minutos de juego. Un parcial de 0-4 permitía
pensar en batalla, pero Maresch sumó dos y de tres, y 46-34. Cage quería
animar a los suyos con canastas imposibles, pero el River aún tenía armas
escondidas, como los triples de Blanch, que aún no había ni siquiera
probado. El catalán no faltó con su cita de los 6,75 y puso el 53-41, que
Maresch amplió con el 56-41. El dominio era claro, y este cuarto terminó,
nuevamente, con el River 16 por encima.
Así que el último período era el
del trabajo hecho, sin permitir sobresaltos. La fiesta era completa, con
el público haciendo la ola y el River sumando y sumando ante un Planasa
desesperado que se marchó del Polideportivo cabizbajo y 25 puntos por debajo.
Crónica:elperiodicdandorra.ad
FC BARCELONA REGAL “B” – PALENCIA BALONCESTO (77-106).
Urko Otegui momentáneo MVP con 33 val. Foto archivo:diariopalentino.es |
El Palencia Baloncesto se impuso
anoche al Regal Barça Btras un espléndido tercer cuarto de los visitantes que,
con una intensa defensa, rompieron la igualdad que mandaba hasta entonces en el
electrónico y, tras un parcial de 17-31, dejaban el encuentro visto para
sentencia.
El encuentro del Palau Blaugrana
comenzaba bien para un Palencia que, tras un intercambio inicial de canastas,
anotaba un parcial de 0-7 que llevaba el 2-9 al marcador. Pese a ello, lo
cierto es que los visitantes habían fallado en esos inicios de partido muchos
tiros y eso permitió al Regal Barça engancharse de nuevo al partido, reduciendo
la diferencia a cinco (6-11).
El encuentro iba igualándose poco
a poco a medida que los locales le tomaban la medida a la defensa palentina,
aunque los visitantes conseguían mantenerse por delante en el luminoso y a un
minuto para el final del cuarto su ventaja era de ocho (10-18).
Pero dos triples consecutivos de
los locales, de la mano de Hezonja y Hakanson, redujeron las distancias al
final del periodo (16-20).
La igualdad era ahora máxima. Al
Palencia le costaba mucho anotar y, mientras, los locales fueron dando pasitos
que les llevaron a colocarse por delante en el minuto 13, tras dos tiros libres
de Iván García (25-24). Aunque Porzingis, desde la línea de tres, volvía a dar
la ventaja a los visitantes (25-27). A partir de ahí, el encuentro entró en una
fase de intercambio de golpes y alternancias en el marcador (29-29). Al técnico
de Palencia, sin embargo, no le gustaba lo que veía en la pista, y pidió tiempo
muerto para intentar que su equipo recuperase la sólidez defensiva.
No cambió mucho la decoración del
encuentro, aunque el mayor acierto visitante en la pintura le permitía llegar
al descanso con cinco de ventaja (39-44).
El parcial palentino se ampliaría
en el inicio del tercer cuarto, tras una canasta de Bravo y un triple de Ott
(39-49, minuto 22), que obligaban a Borja Comenge a solicitar tiempo muerto. La
presión defensiva de los de Natxo Lezkano era ahora mucho más efectiva y, tras
un triple de Garrido y dos tiros libres de Bravo, los palentinos alcanzaban su
máxima renta (45-59, minuto 26). Ventaja que llegaría a los 24 en la recta
final del cuarto (49-73), después de otros tres triples de Garrido y uno de
Porzingis casi consecutivos. Lo que casi sentenciaba. Pese a ello, el Barça no
bajó los brazos, aunque tenía muchos problemas para penetrar en la zona
visitante y sólo con triples y tiros libres conseguía encestar para irse al
final del cuarto con 19 puntos de desventaja (56-75).
No parecía que el Palencia
pudiese tirar por la borda esa ventaja en los últimos diez minutos de choque,
aunque los palentinos afrontaban la recta final con Porzingis y Ott cargados
con cuatro personales.
Sin embargo, y pese a ello, los
palentinos supieron dosificar sus fuerzas y efectivos para mantener a raya al
rival, llegando al final del choque con una ventaja de 27 puntos (77-104).
Crónica: diariopalentino.es
KNET – CACERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD (70-57).
Mikel Úriz con el balón. Foto:cbclavijo.es |
En el primer cuarto, el Knet fue
el claro dominador, llevando el peso ofensivo en todo momento. Tras una
espectacular salida de la mano de Quique Suárez y Serna, el equipo se puso 7-0.
Apretando en defensa, logró parar a los tiradores del Cáceres. Cada pérdida
extremeña era aprovechada por los riojanos, así como cada rebote defensivo y
ofensivo.
En apenas cuatro minutos, los de
Sala se dispararon del 14-9 al 26-9 con un par de triples de Galarreta y la
aportación de Quique Suárez y Guirao. Una valiente penetración de Borja Arévalo
dejaba el marcador en el primer cuarto en el 28-10.
El segundo no fue tan brillante.
A los locales les costó un mundo volver a anotar y de eso se aprovecharon los
jugadores del Cáceres, para bajar la diferencia al entorno de los diez puntos.
Morentín, Nguema y Ashaulu fueron los responsables. Se le secaban las ideas a
los locales, que reaccionaron con un mate de Mejeris y algunos tiros libres
para firmar un pobre bagaje: 10 puntos en diez minutos y sólo dos anotaciones
en juego.
Tras el descanso, la tónica no
mejoró demasiado, pese al triple inicial de Suárez. El balón no quería
atravesar los aros y cada ataque era un suplicio. Pero, otra vez en un par de
minutos enchufados, el Knet logró recuperar la ventaja que el Cáceres había
colocado en cinco puntos (47-42) hasta volver a superar la decena con la
aportación de Arévalo y Mejeris. Al definitivo cuarto se llegó con 55-43 a favor de los riojanos.
La diferencia se mantendría casi
intacta hasta el final debido al acierto defensivo de los riojanos y el
desastre cacereño. Sin brillo, pero con oficio, los de Sala supieron llevar las
riendas del encuentro liderados por el trabajo de Serna y el acierto, a
ráfagas, de Galarreta. Mientras, los extremeños fiaban casi todo su juego al
interior, sin ideas esta noche. Un triple Joan Tomas animaba a la grada,
tranquila y entretenida en molestar a Ashaulu por su juego agresivo. Al final,
una victoria trabajada y poco brillante, pero suficiente para escalar en la
tabla.
Crónica:larioja.com
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