LOBE HUESCA – FORD BURGOS (70-79).
Samuels intenta taponar a Vinicius. Foto:Dpt Comunicación CB Atapuerca |
Los burgaleses firman su undécima
victoria consecutiva, gracias al gran trabajo realizado en Huesca. Los
verdillos aguantaron al líder de la competición hasta el descanso.
El ritmo de Autocid no para. Los
hombres de Andreu Casadevall no se cansan de ganar. Lobe Huesca planteó un
partido según lo esperado, muy físico, con constantes ayudas de dos contra uno
y buscando a Jammar Samuels en ataque. Los burgaleses también ejecutaron su
mejor juego y la igualdad duró hasta el descanso. Autocid, acostumbrado a
buenos terceros cuartos, marcó la diferencia con un 14-23 de parcial que dejó
muy encarrilada la undécima victoria consecutiva. El último cuarto sirvió para
aumentar la ventaja de los visitantes.
El partido.
Andreu Casadevall fue fiel a
su quinteto titular fetiche con: Dani López, Jeff Xavier, Marcus
Vinicius, Jorge García y Luke Sikma. El arranque fue muy anotador por parte de
ambos equipos. Autocid contaba sus ataques por canastas y Lobe Huesca se
aprovechaba de la fortuna de los rebotes ofensivos que les concedían segundas y
hasta terceras oportunidades. La igualdad era patente a la mitad del primer cuarto
con un ajustado 9-10. La segunda parte del periodo fue más errática y el
marcador quedó congelado durante tres minutos (11-12). Dos malos ataques de los
verdillos generó una ligera renta para Autocid (11-16) y Quim Costa pidió
tiempo muerto para afrontar los minutos finales. Con la igualdad por bandera
concluyó el primer cuarto con 15-18 en el luminoso.
En el inicio del segundo
cuarto Lobe Huesca subió un grado la intensidad defensiva que generó un
par de pérdidas de balón por parte de los burgaleses. Los errores estaban
siendo una constante en los tres primeros minutos de cuarto, con sólo dos
puntos de Autocid (19-20). A pesar de las dificultades que estaba encontrando
el plantel azulón, siempre estaba por delante en el marcador y Huesca seguía
cerca. Llegados al ecuador del cuarto, Lobe Huesca se puso por delante por
primera vez en el partido (23-22) y Andreu decidió corregir errores. Las cosas
no pudieron salir mejor con un enorme parcial de 0-8 que devolvió al equipo
burgalés la batuta del partido (25-30). La bocina sonó de nuevo con la misma
renta de tres puntos con la que terminó Autocid el primer cuarto (31-34).
La salida del tercer
cuarto fue favorable a los hombre de Andreu Casadevall, gracias a un
parcial de 2-9 que puso la diferencia en unos notables diez puntos (33-43). A
pesar del buen momento de Autocid, Huesca no bajó los brazos y volvió a
acercarse (42-47).
Por suerte, la conexión azulón se
reactivó y devolvió el partido pronto a la máxima diferencia de diez puntos que
obligó a Quim Costa a solicitar un tiempo muerto (42-52).
En ese momento se vio al mejor
Autocid Ford, mucho control del tempo del partido, sin precipitaciones y con un
porcentaje anotador alto. Con esa dinámica terminó el tercer cuarto (45-57).
El cuarto final tenía que
servir para mantener la ventaja e imposibilitar las sorpresas. Autocid que ésta
temporada no se está conformando con administrar las rentas, sino que busca
siempre ampliarlas. En sólo dos minutos, los azulones anotaron un 3-11 de
parcial que significaba la sentencia del partido (48-68). El tiempo restante
fue poco relevante en lo que a había en juego. Lo más destacado fue la entrada
de Franco Rocchia que aún no había disputado ningún minuto. La bocina sonó con
un 70-79 en el marcador.
Parciales: 15-18 / 16-16 /
14-23 / 25-22.
Lobe Huesca: Charles Abouo
(3), Jamar Samuels (9), Eduard Gatell (9), Lluis Costa (4), Jorge Lafuente (0),
Matej Krusic (6), Adrián Fuentes (0), Eric Sánchez (17), Sandi Cebular (18),
Javier Nasarre (2), Deividas Pukis (0).
Autocid Ford Burgos: Pep
Ortega (6), Dani López (11), Juan A. Aguilar (8), Jorge García (11), Marcus
Vinicius (4), Alberto Miguel (4), Franco Rocchia (0), Luke Sikma (15), Jeff
Xavier (4), Isaac López (14), Sergio Olmos (2).
Crónica:Ismael del Álamo
Dpt Comunicación CB Atapuerca
BREOGAN DE LUGO – BC RIVER ANDORRA (66-77).
Leonavicius ante la defensa de Pablo Sánchez. Foto:elprogresodelugo.com |
Lugo no era una plaza
fácil. Historia, tradición, afición entendida y presión para el River
Andorra, que había visto cómo el Ford Burgos mañana vencía en Huesca y obligaba
a los de Joan Peñarroya a ganar para mantener el coliderazgo.
La plaza era difícil, sí, pero
una vez más los andorranos volvieron a casa con la victoria en el zurrón.Como
durante toda la temporada. Infalibles. Una nueva muesca en el
revólver, esperando el 1 de febrero y la final de la Copa Príncipe , en
Burgos.
El Breogán respondió a las
expectativas. Aquellas que hablaban de un equipo duro en la pintura y que
no daría nunca la espalda al partido. También, como se preveía, la desazón
de los gallegos tras dos derrotas consecutivas se hizo notar en la
pista. Y se supo aprovechar el River, que tiene la virtud de aquellos
pistoleros que saben cuando tienen que apretar el gatillo para hacer
daño. Y eso pasó ayer en el tercer cuarto, cuando los de Peñarroya
rompieron el enfrentamiento y llegaron a dominar de dieciséis en el momento de
máximo nerviosismo de los locales, que no encontraban soluciones a la firmeza
defensiva, una vez más, del River .
Hasta aquí los andorranos habían
llevado siempre la iniciativa tanto en el juego como en el marcador. Bien
dirigidos por Dani Pérez, Hampl y Flis hacían trabajo en ataque ante un rival
que tenía en Winchester (24 puntos al final del encuentro) el mejor
exponente. El Breogán miraba de enquistarse el juego ofensivo de los
visitantes, pero los pequeños supieron encontrar las buenas opciones bajo los
aros, donde especialmente destacó Flis en el segundo cuarto. Gracias a sus
puntos, los andorranos lograron una renta de diez puntos, que se quedaron en la
mitad con el empuje final de los gallegos (36-41 al descanso). El empuje
de los azul cielo siguió en los primeros minutos de la reanudación, pero aunque
el marcador se ajustaba nunca se pusieron delante. Y esto escuece y
desgasta. Y más cuando cada vez que unos apretaban, los otros encontraban
soluciones para escapar un poco más. Y así se llegó a los últimos diez
minutos (49-62 en el marcador), en el que el Breogán quiso emboscó el
River. Con más presión defensiva y un juego más físico, los locales
jugarse el partido en la última bala. Pero no les salió bien. Y no
porque no cortocircuitos a ratos al ataque andorrano sino porque los de
Peñarroya respondieron con idéntica receta. Además defensa detrás. El
tiempo y la desesperación del Breogán jugaba a favor, y al final, con los tiros
libres y alguna buena pasada a los interiores (excelentes Hampl con 18 puntos y
21 de valoración, y Flis, 17 y 22), el River no ni sufrir por la
victoria. Eso sí, la había trabajado antes para evitar encontrarse con más
finales agónicos.
Una victoria más, en espera de la
última jornada antes de la Copa
ante el Lucentum Alicante, uno de los rivales más peligrosos de la categoría y
que hoy juega contra el Barça B. Un triunfo de los alicantinos los
mantendrían como grandes perseguidores de los dos dominadores de la LEB oro, el Ford Burgos y el
River, que están a tres victorias. Buen almohada.
EL VESTUARIO
"Hemos demostrado
solidez"
Joan Peñarroya. El técnico
del river destacó "la solidez" del equipo para explicar la
victoria. "Sabíamos que sería un partido difícil, en una pista
complicada y ante un rival con calidad pero que estaba necesitado. Hemos
dominado siempre y hemos controlado el ritmo, tanto del juego como del
marcador.Además, aparte de jugar mejor o peor, hemos demostrado solidez.
"Tampoco estuvo a elogiar a sus jugadores:" Hoy es una demostración
más de que estamos haciendo una gran temporada. "En cuanto a la aportación
de Hampl y Flis, destacados en ataque, Peñarroya comentó que "estamos
contentos del partido del equipo y del trabajo colectivo. En los momentos
complicados hemos seguido jugando como un bloque, y esa es nuestra fuerza
".
Crónica:diariandorra.ad
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